Obtener la titularidad del vehículo es fundamental a la hora de comprar un coche de segunda mano. Cuando intenta conseguir un cambio de titularidad o desea convertirse en el propietario registrado si el vendedor no posee la titularidad, pueden surgir problemas e incluso considerarse un hecho delictivo en su estado. Disponer de toda la información posible sobre la compra de un vehículo sin titularidad le permitirá valorar si vale la pena ese inconveniente o es más recomendable buscar un coche alternativo.
¿Qué es exactamente la titularidad de un vehículo?
La titularidad de un vehículo es un documento que certifica la propiedad de un automóvil. En la mayoría de los estados, cuando compra un vehículo en un concesionario, la empresa es la encargada del papeleo y del trabajo administrativo, así como de transferirle la titularidad. No obstante, si le compra un vehículo a un vendedor privado, es posible que deba obtener la titularidad por su cuenta.
Los detalles importantes, como si el vehículo está sujeto o no a derecho de retención, también se incluyen en la titularidad. Esto significa que un tercero, como una entidad de crédito o un mecánico al que no se la ha pagado, puede reclamar la titularidad parcial del automóvil. Si tiene previsto comprarse un vehículo de segunda mano y quiere asegurarse de que será el único propietario, esta información es esencial.
¿Qué causa la falta de la titularidad de un vehículo?
Existen varias razones por las que es posible que un vehículo no disponga de la titularidad. El propietario anterior puede haberla perdido o nunca haberla transferido a su nombre. También es posible que el vehículo se haya restaurado con piezas de repuesto o reconstruido, lo que significa que se ha visto implicado en un grave accidente o ha sufrido daños importantes que se han reparado.
Con frecuencia, se suelen comprar vehículos que han sufrido daños mecánicos importantes por inundaciones o siniestros y realizarles simplemente pequeñas reparaciones estéticas antes de venderlos. En estas situaciones, no podrá ver la titularidad antes de adquirir el vehículo. Si no está seguro sobre el estado de un vehículo, puede utilizar el decodificador vin para comprobar el estado de una titularidad con el Departamento de Vehículos Motorizados de California (DMV) o pedirle a un mecánico que inspeccione el automóvil.
Cómo proceder a la hora de comprar un vehículo sin titularidad
Si va a comprar un vehículo sin titularidad, hay algunas tareas que debe realizar para protegerse. En primer lugar, necesitará una factura de venta del vendedor que incluya su nombre, dirección y número de teléfono, lo que le ayudará a localizar los datos si tiene algún problema con el automóvil más adelante. En segundo lugar, deberá contratar una póliza de seguro a su nombre para que esté cubierto en caso de accidente. Finalmente, es recomendable que un mecánico inspeccione el vehículo para comprobar que está en buenas condiciones antes de realizar la compra.
Las desventajas de comprar un vehículo sin titularidad
Existen algunas desventajas a la hora de adquirir un automóvil sin titularidad. Por un lado, puede resultar difícil obtener un seguro para dicho vehículo. Además, si surgiera algún problema con el coche más adelante, es posible que sea complicado demostrar que usted es el propietario legítimo y resolverlo. Por último, si el propietario anterior aún debe dinero por el vehículo (lo que se conoce como derecho de retención), el prestamista sigue siendo técnicamente el propietario del vehículo y puede recuperarlo incluso después de que lo haya comprado.
Casi siempre pagará más cuando compre un vehículo sin titularidad que cuando adquiera uno con una titularidad sin derecho de retención. Como mínimo, le supondrá gastos administrativos y de procesamiento del DMV y es posible que deba obtener una fianza. Cuando inicialmente recibe un precio magnífico por el vehículo, en ocasiones puede valer la pena. Antes de terminar la venta, asegúrese de sumar todos los gastos vinculados. Si tiene pensado comprar un vehículo de segunda mano, debe conocer bien los precios actuales y estudiar su presupuesto.
Si decide comprar un vehículo sin titularidad, intente adoptar algunas precauciones adicionales para protegerse económica y legalmente.
Conclusiones
En resumen, es posible comprar un vehículo sin titularidad, pero no es recomendable, ya que hay una serie de riesgos involucrados al hacerlo que debemos conocer antes de realizar una compra. Sin la titularidad, le podrá resultar difícil contratar un seguro u obtener el registro del automóvil y, si algo sale mal con el vehículo, posiblemente no conseguirá una indemnización por parte del vendedor.
Preguntas frecuentes
Vender un coche sin título es generalmente ilegal en la mayoría de los estados. El título sirve como prueba de propiedad, y sin él, la transferencia de la propiedad legal se vuelve problemática. Algunos estados pueden tener excepciones, pero es crucial verificar las regulaciones locales y obtener la documentación necesaria antes de vender.
Típicamente, el nombre en el registro del coche y el título deben coincidir. Sin embargo, en algunos casos, esto puede ser posible si ambas partes están de acuerdo y hay documentación legal.
En muchos estados, los coches de más de 20 años pueden calificar para una exención de título, a menudo reemplazada por una factura de venta y otras formas de prueba de propiedad. Sin embargo, los requisitos varían según el estado, por lo que es esencial consultar con tu DMV local.
Para eliminar a un segundo propietario del título de tu coche, ambas partes generalmente necesitan firmar el formulario de transferencia de título. Preséntalo en tu DMV junto con cualquier otro requisito: tarifas y documentos de respaldo. Luego, emitirán un nuevo título con la información de propiedad actualizada.
Chatarrear un coche sin título puede ser un desafío, ya que la mayoría de los desguaces requieren prueba de propiedad para evitar procesar vehículos robados. Algunos estados ofrecen métodos alternativos, como proporcionar una factura de venta o un certificado de chatarra.